Afilar correctamente hachas y hachas de guerra: Una guía completa para afilar herramientas forestales
Afilado de hachas y hachas de guerra
Un hacha afilada y un hacha afilada facilitan mucho el trabajo. Ya sea para partir leña, desramar o talar árboles, con la técnica adecuada y las herramientas apropiadas podrá conseguir resultados perfectos. Esta guía le dirá todo lo que necesita saber sobre el afilado de hachas y hachuelas.
¿Por qué es importante afilar las hachas y las hachas de guerra?
Una herramienta desafilada dificulta innecesariamente el trabajo y puede provocar lesiones debido a la mayor fuerza requerida. El afilado regular mantiene afilado el filo de corte y minimiza el riesgo de deslizamiento debido a golpes incorrectos. También se alarga la vida útil de la herramienta, ya que se requiere menos fuerza y el filo se desgasta de forma uniforme.
La preparación adecuada
1. herramientas y materiales
Para afilar se necesita lo siguiente:
Guantes de trabajo con sensibilidad en los dedos
Piedra de lija cerámica (grano grueso aprox. 250 y grano fino aprox. 1000) alternativamente papel de lija húmedo con grano adecuado
Aceite o agua como lubricante
Vicio o base estable
Trapos o cuero para decapar
o una lijadora en húmedo
Asegúrese de que la zona de trabajo está bien iluminada y ordenada.
2. ángulo de rectificado de los ejes
El ángulo de afilado depende del uso previsto del hacha o el hacha de guerra.
Hacha de mano: normalmente 20 - 25
Hacha forestal: normalmente 20 - 25
Hacha de dividir: normalmente 25 - 30
Nunca debe modificarse el ángulo de corte existente en un hacha o hachuela.
Una buena forma de apoyar esto visualmente es marcar el borde de corte con un rotulador resistente al agua, por ejemplo, un rotulador permanente. Esta marca debe lijarse a continuación.
Instrucciones paso a paso para afilar
1. métodos de trabajo
Para poder afilar cómodamente un hacha o un hacha de guerra, o bien el abrasivo debe descansar sobre una superficie de trabajo antideslizante y sin bamboleos, o bien la herramienta forestal debesujetarse en un tornillo de banco en unángulo de 90°.
Una altura de trabajo cómoda también es importante para mantener el ángulo de lijado lo más constante posible.
2. lijado basto
Comience con una piedra de lija gruesa o un papel de lija húmedo grueso (grano 250 aprox.). Humedezca la piedra de lija o el papel de lija con agua o aceite para minimizar la acumulación de calor. A continuación, lije uniformemente con pequeños movimientos circulares en el ángulo correcto.
Es una buena ayuda marcar el borde que se va a lijar con un lápiz de color. En cuanto se haya lijado la marca, se habrá completado el lijado basto.
3. toques finales
A continuación, pase a la piedra de lija más fina o al papel de lija húmedo (grano aprox. 1000). Repita el proceso de lijado para obtener una superficie lisa. Elimine todos los arañazos e irregularidades del lijado grueso. También puede utilizar aquí un rotulador de color como ayuda.
4. arrancar
Utilice un estropajo, un rascador de cuero o un disco rascador de cuero para pulir el filo y eliminar las últimas rebabas finas. Esto hará que el filo esté especialmente afilado.
5. control
Compruebe el afilado pasando cuidadosamente la cuchilla sobre una hoja de papel. Si la hoja corta el papel, el afilado es perfecto. Si es necesario, repita el proceso de afilado fino y bruñido.
Métodos alternativos: Afilado a máquina
Las máquinas también pueden utilizarse para herramientas muy desgastadas o bajo presión de tiempo:
Lijadora de banda: Ideal para el afilado grueso. Asegúrese de enfriar la cuchilla con regularidad para evitar el sobrecalentamiento.
Amoladora angular: El filo de corte puede mecanizarse rápidamente con un disco de láminas (grano 100). Sujete el hacha en una mordaza y guíe con cuidado la amoladora a lo largo del filo de corte. Enfríe con agua entre medias.
Rectificadora en húmedo: Pueden conseguirse muy buenos resultados con una rectificadora en húmedo y las piedras de amolar adecuadas. Dependiendo de la máquina, los ángulos de corte pueden ajustarse fácilmente y mantenerse con precisión.
Al afilar mecánicamente con una amoladora de correa o angular, existe el riesgo de sobrecalentamiento. Si el filo se vuelve azul, el acero se ha calentado demasiado y ha perdido la dureza deseada. El filo está estructuralmente dañado y no podrá mantener su agudeza durante el uso.
Cuidado y almacenamiento
Tras el afilado, el cuidado adecuado es crucial:
Aplique una fina capa de aceite (por ejemplo, Ballistol) en el filo de corte para evitar la oxidación.
Guarde el hacha en un lugar seco y proteja el filo durante el transporte.